ººº yo sólo quiero una vida normal. o no angustiarme por nada ni capilla.
salir corriendo a ningún lugar, y què felíz sin preguntarme casi nada ((que si hoy las cosas/me hacen bien o me hacen mal));
pero voy al astrólogo y le consulto por planetas y casas, y despuès cómo buscar LA normalidad si pregunto por saturno o por una cuadratura al sol de neptuno. ('nadie puede pretender si pregunta por eso', me digo)
y entonces desatención, agujero negro en el estómago y un llanto contenido sin gritar porque alguien me mira y no me entiende. bu. pienso otra vez la misma conclusiòn que me aburre: tengo dos partes interconectadas que hablan idiomas distintos, exactamente como un gato y un perro: cuando uno mueve la cola, el otro quiere pelear.
a la mañana me miro el ombligo y decido. nueve y cuarto. para qué lado camino, a quién escucho hoy ººº